Vos protegiste tus ideas.
Vos cuidaste tu interior.
Vos negaste el pedido.
Vos enfrentaste el temor.
Vos decidiste dar un paso.
Vos dijiste que no.
Vos te negaste a hacer lo mismo.
Vos priorizaste tu razón.
Vos acunaste tus tesoros.
Vos coincidiste con él.
Y todas las veces que
dijimos vos
un silencio atroz vino a proceder.
Las voces de las que
no sabemos el nombre.
Los ojos de las que
no conocemos su piel.
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Quedan en el camino
despojos de sus miradas
del grito que no escuchamos,
que no nos animamos a ver.
Lara Rivera©